El Internet de las Cosas, inserto en el mercado de Machine to Machine (M2M), trae incontables oportunidades de desarrollo de negocios. Algo similar a lo que ocurrió con el surgimiento de internet, o quizás aún más grandioso. De acuerdo con el instituto de investigación Gartner, se estima que 8,4 mil millones de cosas estarán conectadas y en uso este año en el mundo. Un aumento del 31% si lo comparamos con los datos de 2016. Para tener noción de cuán avasallador es el crecimiento del Internet de las Cosas, hasta 2020 la estimativa es que sean 20 mil millones de cosas conectadas en el mundo.
El mercado de M2M para las industrias, de una forma general, puede considerarse maduro. Segmentos como el automotor, de energía, de e-health y otros servicios de consumo ya usan el IoT hace tiempo, con éxito. El gran cambio para los próximos años es el mercado de objetos conectados para el público en general.
Valid es una de las empresas que están integrando objetos a internet. Uno de nuestros casos más brillantes es con la marca de automóviles Audi. Junto con Cubic Telecom, fue desarrollada la tecnología para el Audi connect en los modelos A3, A4, A5, Q2, Q5 y Q7 y S4 de la marca, lanzados en 13 países de Europa. El Audi connect ofrece conectividad ininterrumpida para información y entretenimiento de alta calidad, conjuntamente con el acceso a planes de conectividad, incluyendo telemática, servicios de hotspot Wi-Fi, aplicaciones personales y mucho más.
Crear y ejecutar una estrategia de IoT para cualquier organización no es tarea fácil. Aún más con el desafío de responder a necesidades diversas, de todos los sectores industriales, con la multiplicidad de objetos existentes. Se trata de proyectos complejos, de riesgo. Es fundamental tener las respuestas para las preguntas adecuadas y contar con fuertes aliados industriales y comerciales.
¿Cómo percibir la oportunidad?
IoT ofrece muchas posibilidades y deben priorizarse de acuerdo con la capacidad de comprensión del mercado. Una buena práctica es empezar a evaluar el escenario con un análisis FODA (fuerzas, oportunidades, debilidades, y amenazas). Esté atento especialmente a las percepciones de su cliente. Uno de los principales motivos de fracaso en la innovación es la ausencia de investigación con el potencial usuario del producto.
¿Cómo elegir bien a sus aliados?
Tener al lado proveedores de soluciones con experiencia y credibilidad en su área de negocios ayuda a completar las lagunas de estrategia. El análisis conjunto de la cadena de valor dará una visión amplia de todo el segmento de actuación. Abandone las visiones estrechas a partir únicamente de su negocio.
¿Cómo medir el resultado?
Estamos hablando aquí de la viabilidad del negocio. Las métricas comunes no suelen demostrar, por ejemplo, lo que se gana con el conocimiento. Piense en formas de medir el éxito –vinculando la estrategia global de su empresa.
¿Cómo vender la idea hacia dentro de la empresa?
Explicar una gran idea y tener el aval para ponerla en práctica. Se necesita una planificación de comunicación. ¿Qué tal crear un anuncio del producto? Esto brindará una visión más clara de las oportunidades y diferenciales del IoT. Incluso se podrá elaborar un comunicado para la prensa, un manual de usuario. Es decir, traer a la realidad lo que está en el campo de las ideas. Otra sugerencia es calcular y disminuir los riesgos del proyecto. Pruebe su IoT antes de más nada. Puede ser con un prototipo, un proyecto mínimamente viable, en conjunto con otras empresas del sector. El bestseller “The Lean Startup” sugiere que la invención sea probada, por lo menos, con 100 potenciales usuarios. ¿Por qué? Para certificar que existe la necesidad.
¿Qué capacidades técnicas reunir?
John Rossman, exejecutivo de Amazon, compartió su checklist para una implementación exitosa.
- ¿Qué problema del usuario final está resolviendo?
- ¿Qué insights serían valiosos para el cliente?
- ¿Qué recomendación u optimización a partir del uso de los datos que usted pasará a tener sería valiosa para el cliente?
- ¿Qué datos necesitan recogerse?
- ¿Cuán responsivos serán los “ajustes” u optimizaciones (especificar en el intervalo de tiempo)?
- ¿Cuán complejos serán los “algoritmos”?
- ¿Las notificaciones serán consistentes y fijas, o será necesario configurarlas, actualizarlas y gerenciarlas?
- ¿Cuáles son las consecuencias de que los datos no sean recogidos?
- ¿Cuáles son las consecuencias de que los datos estén siendo recogidos pero no estén siendo transmitidos?
- ¿Cuál es el rango de costo operacional adicional que la empresa puede soportar para la infraestructura operacional en marcha?
El IoT no es la respuesta a todo. Pero una buena estrategia garantizará que la solución entregue valor y, probablemente, traerá éxito.